De guachimán a jinete

Desde muy pequeño, Diogdinabi Smith de Sedas se levantaba a las 5:00
de la mañana para ayudar a sus humildes padres en la Comarca Guna. Era
un niño muy cooperador y con ganas de triunfar en lo que fuera.
Rodeado
de playa y arena en el Caribe panameño, el popular ‘Dio’ cumplió sus
estudios en el Centro Básico General Nele Kantule, en la comunidad de
Ustupu.

‘Buscaba cocos y plátanos para comer y vender’, confesó el diminuto y delgado guna.
Años
más tarde, su padre emigró a la ciudad buscando un mejor futuro, cambio
que aprovechó Diogdinabi para encontrar su verdadero talento.
Cuando
el hambre apretaba y el dinero se terminaba, Romero Smith, padre de
‘Dio’, le consiguió trabajo de guachimán en el Hipódromo Presidente
Remón. No podía perder esa oportunidad para cobrar.
Diogdinabi,
algo asustado, pero con los buenos valores de su padre, llegó una hora
antes de lo previsto a la cuadra de Celestino Carbonell para cuidar a
los ejemplares en el establo.
‘Primero lavaba carros, pero el dinero no me alcanzaba’, comentó.
Lo descubrieron
Con el pasar de los días hizo buenas amistades por su carisma hasta que llegó una propuesta que le cambiaría la vida.
Los
mozos de aquel corral le vendieron la idea de ser jinete por su tamaño y
su peso. Para ellos, ‘el ideal para triunfar en el deporte de los
reyes’.
‘Yo no vine a Panamá con la idea de ser jinete. Nunca
había montado un caballo en mi tierra. Pero los mozos me animaron y
estoy muy agradecido con ellos’, explicó el joven de 23 años.
Diogdinabi conversó con su padre de aquella idea y el señor Smith le dijo: ‘esa es decisión suya. Lo que decidas, lo apoyaré’.
Con
esas palabras, ‘Dio’ comenzó a lidiar con los caballos. Les ponía las
vendas, los bañarba, los caminaba y los montaba en la pista chica.
Luego
de comprender a los ejemplares, el hijo de la Comarca Guna ingresó a la
Academia Técnica de Formación de Jinetes Laffit Pincay Jr., mientras,
todavía trabajaba de guachimán.
Pasaron las pruebas teoricas y
prácticas y Diogdinabi se convirtió en uno de los mejores de la
generación 2014, de la que se graduó el pasado martes en la noche.
El orgullo guna
Además
de graduarse de una carrera que jamás pensó desempeñar, ‘Dio’ se
convirtió en el primer jinete de origen guna en montar en el HipoRemón.
‘No
tengo palabras para agradecer a las personas que me han apoyado,
principalmente a mi padre que siempre me ha alentado’, expresó entre
lágrimas.
Su padre siempre lo aconsejó y lo motivo en los momentos difíciles. Fue su mejor amigo e inspiración.
El aprendiz dejó el trabajo de seguridad y ahora le espera toda una vida por delante para triunfar en las pistas nacionales.
Diogdinabi
reside en Cabuya, Tocumen, en un cuarto de alquiler junto a dos
hermanas, su madre y padre. Ahora le toca levantarse a las 3:30 de la
mañana para llegar al Hipódromo a iniciar su faena
‘Quiero
comprarle una casa a mi familia. Quiero dejar el nombre de Panamá en
alto, si me toca montar en el extranjero. Quiero ser uno de los
mejores’, nos dijo con una mirada de confianza en cada palabra.
‘Dio’
debuta mañana guiando las riendas de ‘Café Tabaco y Ron’, con gabela de
5-1; el domingo tendrá su segunda oportunidad cuando monte a ‘El
Calidad Canelón’, de 5-2. Ambas pruebas serán sobre tendido de mil 100
metros.

Crédito: 
Jimmy Young
[email protected]

Diario El Siglo, de Panamá
www.elsiglo.com

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