Por Antonio José Medina
El hipismo venezolano ha tenido grandes seres humanos, trabajadores que desde las 4 de la mañana se levantan para salir adelante, velar por sus familias y por sus hijos especiales: los ejemplares purasangres de carreras.
La inesperada partida de Pedro Gandica, me causó mucha tristeza. Un amigo bregador, atento y sencillo. Lo conocí desde que Taconeo, Bambera y Water Jet iniciaron sus grandes carreras y sus hazañas con la Triple Corona. Era uno de los primordiales capataces del entrenador Gustavo Delgado.
Pedro permaneció por más de 45 años laborando en el Hipódromo La Rinconada. Estuvo en las caballerizas de los entrenadores Manuel Medina, Carlos Morales, Gustavo Delgado, Nelson Castillo (su yerno), y recientemente con el Stud San Ros y al lado de la campeona Sandovalera.
Pero, en sus tiempos de caballerizo cuidó al caballo My Body Guard, en la cuadra de Manuel Medina. Ese ejemplar ganó la Copa Leopoldo Manrique de 1985 que volvió y ganó en faena de la jocketa Marjorie Clayton. Imaginamos la alegría de Pedro Gandica con su jáquima en la mano y su gorra que no podía faltar.
Se fue un gran trabajador. Desde este rincón le rendimos homenaje a este héroe anónimo. Pedro, muchas gracias por tu amistad y muchas gracias por entregarte todos los días por un mejor hipismo venezolano. Un abrazo y QEPD.
Acerca del autor
CON MUCHO RESPETO EL NO CUIDO A MY BODY GUARD
Buenos días señor Reinaldo. Fue informació0n suministrada y corroborada por sus familiares y tienen fotos en su casa con el caballo. Saludos.