Por Antonio José Medina.
El recordado jinete Jesús Márquez dio una vuelta este miércoles en el Hipódromo La Rinconada y compartió con sus viejos amigos en la jornada de traqueos. “El Negro” goza del cariño y el respeto, y además; con su habitual buen humor.
Siempre está en el recuerdo de los hípicos, tras sus triunfos con los caballos Sweet Candy, Bolinge y Gran Edward, entre otros.
“Estoy bien. Por lo menos bien de salud. Visitar el hipódromo siempre es agradable. Y vengo a los traqueos porque uno en la casa y encerrado se pone viejo y gafo (risas). Aquí siempre hay amigos y estoy en mi ambiente. Paso un rato muy feliz”, dijo el orgullo de La Pastora.
Jesús Márquez aspira a tener alguna actividad o un trabajo en el hipismo para mantenerse activo porque “ya uno cuando pasa de los 60 años es cuesta arriba conseguir una chambita. Hay que estar limitado, viendo televisión, disfrutar y jugar con los nietos que eso si es una bendición. Eso es una gran felicidad estar con los nietos y mis hijos”, dijo.
“El Negro” por ahora sigue con su familia. “Disfruto de mis partidas de dominó. Un saludo a toda la afición hípica, se les quiere mucho”, se despidió.